Ayer recibimos la siempre grata presencia de nuestra gran amiga Kasandra Aguirre Puga, quien, desde que Dios la trajo al mundo nunca ha dejado de ser bella como siempre.
Por cierto como aquí lo hemos hecho saber en múltiples ocasiones a nuestra paisana le robaron el Primer Lugar Nacional en Belleza para entregarle la segunda posición y aunque la gente protestó el jurado jamás cambió su decisión.
Estaba vendido con la gente de Colima.
Pues estamos en primavera y cosa rara pero el monte está seco, no hay vegetación ni los alegres sembradíos de maíz, frijol, papaya, aguacate, naranja, melón, sandía, cebolla, tomate y otros granos como eran muy comunes en épocas pasadas.
El agua falta en el campo, el trabajo escasea, del dinero ni se diga y con eso que está muy caro anda en las nueves como los zopilotes rastreando a sus víctimas.
En fin si no se componen las cosas entonces sí que Dios y su sagrada familia nos agarren confesados.
Bueno con decirles que alguien nos preguntaba ¿Dónde está el dinero?
La respuesta fue rápida.
¿Pues dónde cree usted que está?
Pues en los bancos de Canadá, Estados Unidos de Norteamérica y en Europa.
No pos” sí.
A propósito amigo mío:
¿No le sobran por ahí unos mil pesillos para que me los preste?
Újele abuelita, yo te los iba a pedir a ti.
Pa” su mecha, diría doña Melquiades, que jodencia.
Y revira….
Porque chingados no fui presidente de la república, gobernador o alcalde de perdido.
La respuesta aunque grosera no deja de tener su encanto
Por pendejo.
¡¡¡ Tá gueno !!!.
Y agregué, solo que por eso sea.
Aunque no lo crea pero ayer que fuimos a Ciudad Victoria, Tamaulipas; nos dimos una revirada en varios bancos y nadie de los clientes depositaba algo… todo mundo sacaba sus ahorros.
Las razones huelga decirlas.
A propósito: ¿Quién fregados se lo llevó?
Ayer al momento de escribir esta tribuna recibimos la muy lamentable noticia de que nuestro amigo don Luis González Balboa falleció en su casa de Llera alrededor de las cinco de la tarde, Tamaulipas, víctima de ese mal que ha cobrado varias vidas como es la azúcar, esperando que su familia y amistades encuentren pronta resignación.
De él podemos platicar muchos y agradables recuerdos pues lo conocimos en el Tecnológico de Ciudad Madero, Tamaulipas; posteriormente volvimos a reencontrarnos en el pueblo de mis mayores y reanudamos nuestra vieja amistad.
Él era hijo del matrimonio de muy gratos recuerdos como lo fueron don Luis González y doña Oralia Balboa.
Descanse en paz.
HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE