Testigo presencial de muchas injusticias ocurridas, desde su infancia allá en Santa Engracia con el propósito siempre de luchar por remediarlas, principalmente, en su amado Cuarto Distrito, tomó la ruta de los luchadores sociales a través del periodismo, siguiendo el trazo de Alberto Carrera Torres, el amigo, maestro y hermano, José Luis Contreras de la Fuente, con su estilo diferente, se despidió valientemente para llegar a la cita ineludible de su destino.

Las huellas de aquel, las pisó José Luis miles de veces por varios decenios y las hizo suyas, ensanchándolas, al tiempo que esparcía las simientes de su lucha para que las generaciones nuevas de periodistas las siguieran convertidas en hondos senderos que facilitan en la actualidad el trabajos de muchas publicaciones que tienen sus orígenes en “La Voz de Tula, “La Voz de Tamaulipas, “La Voz 400” y muchas más.

Esa labor, en muchas ocasiones se transformó en referencia obligada convirtiéndola en un importante liderazgo de la opinión pública, los premios y los reconocimientos se multiplicaron a lo largo de los años y así, al poco tiempo del asesinato del periodista Manuel Buendía Téllez Girón. Aquí en Tamaulipas se le otorgó el premio Manuel Buendía.

En sus exequias nos comentaba la compañera y amiga Ana Luisa García, que cuando se le entregó a José Luis Contreras de la Fuente, esa distinción, se congregaron para felicitarlo once presidentes municipales.

En esa mesa de quienes asistimos a los funerales de José Luis se hicieron comentarios y recuerdos de su fructífera vida periodística, fue numerosa la presencia de muchos compañeros informadores de todo el estado de Tamaulipas.

En esa mesa se hicieron recuerdos de la labor del desaparecido, de pronto, la aguerrida Mary Jaramillo nos dijo, “bueno, también hay que contar lo bueno, por parte del Gobierno del Estado, estoy enterada que se hicieron presentes las atenciones para la familia de José Luis, desde que se conoció lo grave de su salud a través de la Dirección de Relaciones Públicas, se dieron las instrucciones a Martha Rubio para que recibiera lo que fuera necesario, sin escatimar esfuerzos hasta este triste final, lo que hizo cabalmente”.

Se habló de la vida, de las realizaciones, de las preferencias, de la gratitud, de la lealtad, de las traiciones, de las alegrías, de los sinsabores, de los amores y desamores que, son reflejos de los sentimientos personales DE TODOS que, coincidentemente revelan la naturaleza de nuestro quehacer cotidiano que nos compromete a hablar con la verdad, por sobre todas las cosas.

Se fue José Luis por un sendero de CUETLAXOCHITLS acompañándolo, este mes será referencial para todos sus seres queridos y sus compañeros de oficio, por mi parte, de manera muy especial les deseo que tengan presente que en este mes, revive naturalmente la CUETLAXOCHITL y con ella los recuerdos y regreso a los senderos acostumbrados y, si la suerte se nos da, por ahí nos encontraremos.