Las bajas temperaturas en Westbrook, una pequeña ciudad en el estado de Maine (EE.UU.), han formado un enorme disco de hielo giratorio en el río Presumpscot.

Mide 91 metros de diámetro y algunos lo han comparado con un carrusel, la Luna o incluso con una nave extraterrestre.

El gigantesco "cráter" tan grande como París encontrado en Groenlandia y cuál podría ser su origen
El iceberg rectangular que la NASA fotografió en la Antártica
Pero la realidad es que se trata de un fenómeno natural, explicaron los científicos.

Los discos de hielo se forman en las curvas de los ríos, donde el agua que fluye más rápido crea una fuerza que socava los bordes a medida que el hielo gira.

Además de haber atraído la atención de personas en todo el mundo, ya hay quien le ha sabido ver un sentido práctico. La prensa local asegura que está sirviendo de balsa para patos y otras aves.