El Fogón
El agotamiento de JR
Por: José Ãngel Solorio MartÃnez, 15-02-2019 .
José Ramón Gómez, el súper delegado del gobierno federal para Tamaulipas, va de tropezón en tropezón. No ha podido crear una estructura eficaz, para avanzar en los censos sobre los cuales operan los programas sociales del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador; la red de sub delegados que creó, anda igual de despistada que él; sus más cercanos colaboradores, es un grupo de jovencitos que actúa como sus damos de compañÃa, pero no como siervos de la nación; ante esas eventualidades, ha entregado ese tejido social a los alcaldes –en su mayorÃa panistas- quienes reciben recursos para ser entregados por ellos a jóvenes y adultos mayores.
(Ojo: no se está afirmando, que deba distanciarse de los presidentes municipales. No. Eso, hasta podrÃa verse como un gesto incluyente. Se está afirmando, que con una ingenuidad –seguramente, proveniente de su cosmogonÃa fifÖ está regalando una urdimbre con invaluable valor polÃtico, a sus adversarios).
Esas fisuras, están permitiendo que la notable ventaja de MORENA en Tamaulipas, sobre sus detractores se diluya. En municipios como Reynosa y Tula, los alcaldes son quienes cosechan los logros positivos de la polÃtica social del gobierno de la república.
Uno de los municipios con mayor atraso de la asignación de JR –y pude afirmarse que hasta olvido- es ciudad Victoria. Parece tener pánico, a incomodar a los actores polÃticos que tienen su asiento en la capital.
Se puede decir, que la responsabilidad del súper delegado del gobierno lopezobradorista en la entidad, ha sido hasta ahora –al menos es lo que presume– tomarse fotos y publicarlas en las redes sociales de lo que él considera notable trabajo.
La búsqueda de la alternancia en el Congreso del estado y en el gobierno estatal, deben pasar necesariamente por el contraste de las polÃticas sociales del gobierno federal actual y de sus antecesores. El distanciamiento que está realizando –con grandÃsimos esfuerzos AMLO- de las polÃticas sociales neoliberales, no ha sido asimilado por sus representantes locales.
Lo ven, pero no lo comprenden.
La IV Transformación, no se escucha en voz de JR. Su discreto discurso, se asemeja a una charla entre jóvenes frÃvolos y superficiales. Él y sus cauda de jovencitos, parecen profetas de la moda y del aliñamiento –que no es malo, si no fuera lo único que practican– y no de un movimiento que busca pasar a la historia como un gobierno popular y de Izquierda.
Definitivamente: la polÃtica social, no es lo de JR.
Y no es su origen.
Es más bien, el destino al que quiere llegar.
Otro elemento que habla de su inconsistencia en el cargo, es su postura ante la participación en esta contienda por la renovación del Congreso, de algunos familiares suyos. En ciudad Victoria, le ganó la atracción de la sangre. En franco apoyo a la candidata panista, JR, se esfuerza en debilitar a la candidata lopezobradorista, Vanessa Mata. Utilizando a su grupo de jóvenes satélites, socaba la presencia social de una de las más fuertes candidaturas de los morenistas en Tamaulipas.
JR, ya es un problema para la presidencia de la república.
¿Qué sigue?
No se ve otra salida.
Más que la de JR.
Claro: si se quiere rectificar. Si no: Tamaulipas tendrá que esperar el aterrizaje de la IV Transformación. La inexperiencia, se puede superar; la ineficiencia, es más complicado de subsanar. El asunto, es que el súper delegado, posee ambas en una proporción superlativa.
En municipios como Nuevo Laredo y Matamoros, los potenciales beneficiarios de la polÃtica social de AMLO, están desesperados. Los representantes de JR, no han podido llegar a sus domicilios. Decenas de miles de discapacitados, y de hombres de la tercera edad, no pueden asistir a los lugares a donde se les convoca para censarlos. (JR, no entiende que para la gente necesitada, gastar en dos peseras se les va el sustento de varios dÃas).
¿A quién se le ocurrió enviar a este súper representante del presidente de la república a esta tierra de lagartones sociopolÃticos, sin una capacitación previa?
Quien sabe.
Los cierto, es que esas deficiencias, están lastimando la posibilidad de expresión de la IV Transformación y la de los hombres y mujeres que quieren promoverla en Tamaulipas.