Miles de personas se movilizaron por las principales avenidas de Managua para exigir la renuncia del mandatario, quien amenazó con mantener sus operaciones contra un “golpe de Estado”

Managua, Nicaragua, Jul 22 (Agencias) .- En abierto desafío a las amenazas del presidente nicaragüense Daniel Ortega, de que no permitirá rebeliones y ordenar a sus grupos leales (policías y grupos de choque) con mantener activos los “mecanismos de autodefensas” para evitar un posible “golpe de Estado”, miles de nicaragüenses al grito de “No es un presidente, es un delincuente”, se manifestaron por las principales avenidas del este de Managua para exigir la renuncia del mandatario, a quien responsabilizan de la muerte de al menos 368 personas durante las manifestaciones contra su régimen.
Convocados por organizaciones defensoras de los derechos humanos y activistas que exigen elecciones anticipadas, los manifestantes regresaron a las calles para exigir justicia por al menos 368 muertos en las protestas y para exigir la salida de Daniel Ortega del poder.
CONSIGNAS. De acuerdo con medios locales como el periódico La Prensa, miles de personas participaron en dos marchas realizadas en la capital donde coreaban leyendas como: “Solo el pueblo salva al pueblo” y “Masaya florecerás”, que se unieron antes de llegar a la rotonda Jean Paul Genie.
“Que se vayan”, “Ortega y Somoza son la misma cosa”, “Fuera Ortega”, fueron algunas de las consignas que gritaban los manifestantes, a las que se sumaron otros gritos como el de “Daniel Ortega, ya no te queremos. Déjanos vivir en paz”.
Mientras se desarrollaban estas manifestaciones por varias calles de la ciudad, ciudadanos salían de sus casas y se sumaban a esta convocatoria portando banderas azul y blanco en señal de apoyo y automovilistas que al sonar su claxon apoyaban su movilización.
REPRESIÓN. Nicaragua vivió ayer su día 95 de protestas en contra del régimen, que en su intento por frenar los llamados para que Ortega deje el poder, el gobierno optó por la represión contra opositores, la mayoría estudiantes, lo que ha dejado al menos 368 muertos y más de 2 mil heridos.
Por otra parte, la policía expulsó del portón de sus oficinas en “El Chipote” en Managua, a decenas de madres que preguntaban por sus hijos, que fueron arrestados o desaparecieron durante las manifestaciones.